Alma mía
Óleo / lino
150 x 210 cm
2020
Ish: Homenaje a la gran ola de Kanakawa
Óleo / lino, madera
150 x 222 cm
2019
De raíces y brotes
Óleo / lino
200 x 110 cm
2020
De amor y de luz
Óleo / lino
200 x 200 cm
2020
Paisaje de otoño
Óleo / lino
230 x 130 cm
2020
Noche y día
Óleo / lino
200 x 180 cm
2020
Elixir de té
Óleo / lino
220 x 85 cm
2021
Canción de la tierra, 1
Óleo / lino
180 x 100 cm
2021
Herencia, 2
Mixta sobre papel
70 x 31 cm
2020
Herencia, 1
Mixta sobre papel
192 x 93 cm
2020
Nueve x 9
Óleo / lino, madera
200 x 96 cm (9 piezas)
2021
El corazón te habla
Óleo / lino, madera
203 x 103 cm
2019
Línea Horizonte
Óleo / lino
240 x 51 cm
2020
Black Circle, 3
Óleo / lino
136 x 55 cm
2020
Black Circle
Óleo / lino
180 x 100 cm
2020
Cabalgué para encontrarte
Óleo / lino
102 x 45 cm
2020
Cabalgué para encontrarte
Óleo / lino
102 x 45 cm
2020
Mi alma enamorada estaba triste
Mixta sobre papel
15 x 11 x 4 cm
2020-2021
Un hilo rojo para no perderme
Mixta sobre papel
33 x 25 x 2 cm
2020-2021
South San Francisco, Ca.
Mixta sobre papel
28.5 x 36 x 4 cm
2020-2021
Ravena
Mixta sobre lino, madera
7 x 11 x 2.5 cm
2021
Sakti
Mixta sobre lino, madera
7 x 11 x 2.5 cm
2021
Artemisa
Mixta sobre lino, madera
7 x 11 x 2.5 cm
2021
Canto a la tierra
Óleo / lino
125 x 200 cm
2020
Canción de la Tierra
EL VUELO DE LA ESCRITURA
Entre tantas cosas que hace sentir y pensar la obra de Virginia Chévez, retiene mi atención ahora ese elemento gestual que irrumpe en sus cuadros y que por comodidad llamamos escritura. Lo hemos visto antes en su obra. Pero atrapa ahora de manera enfática, sostenida. No sólo es mayor su presencia. Es tan distinta que modifica en parte, me parece, la naturaleza misma de los cuadros. Casi siento a ratos que el entorno de la caligrafía es extensión de ella. Y su presencia en esta obra es un masivo vuelo inusitado.